Intergia ha escogido como lema Energía y Sostenibilidad, y como principal ámbito de aplicación, el medio rural

Energía

La energía es necesaria para la supervivencia y el bienestar de la humanidad. Después de milenios de escasez, durante poco más de dos siglos, hemos dispuesto de energía relativamente barata, basada en combustibles fósiles. Actualmente, tres causas principales impulsan la transición energética hacia fuentes de energía renovables: por una parte, la contaminación producida por el uso intensivo de los combustibles fósiles, así como la insostenibilidad de su consumo; por otra parte, los avances tecnológicos en la producción y uso de la electricidad como vector energético, que superan con creces las posibilidades de, por ejemplo, los motores de combustión; y por último, el abaratamiento de las nuevas tecnologías de generación renovable.

La transición energética va a suponer una auténtica revolución. Las nuevas tecnologías energéticas, acompañadas por las de información y comunicación, van a modificar profundamente los entornos industriales y urbanos, así como la movilidad.

Sostenibilidad

En estos tiempos, la ciencia primero y la sociedad después, han tomado conciencia de la necesidad de incorporar la sostenibilidad a todas las actividades humanas, especialmente las actividades económicas.

Una primera definición de sostenibilidad, datada en 1987, consiste en “satisfacer las necesidades de la actual generación sin sacrificar la capacidad de futuras generaciones de satisfacer sus propias necesidades”. Actualmente, se considera que la sostenibilidad engloba múltiples aspectos. Además del aspecto ambiental, en Intergia también prestamos especial atención al económico. Así, contribuimos a que las actividades económicas sean respetuosas con el medioambiente y a la vez produzcan beneficios a largo plazo.

El medio rural

Desde la revolución industrial, el medio rural ha estado marginado en cuanto a la creación de riqueza, sufriendo carencia de infraestructuras energéticas, industriales y de transporte. Sin embargo, los cambios tecnológicos y sociales que se están produciendo van a dotar al medio rural de unas posibilidades y un protagonismo muy especial. Por una parte, en él se encuentran las áreas naturales y seminaturales que han de gozar del máximo respeto ambiental. Por otra parte, allí se dispone de un acceso privilegiado a las fuentes de energía renovable, como la solar, eólica, hidráulica, biomasa y otras. Las nuevas tecnologías de generación in situ a media y pequeña escala permiten eludir la dependencia de un suministro energético que hasta ahora ha sido de alto impacto ambiental y muy costoso. Se abren nuevas y rentables posibilidades de acceder a la energía en el medio rural. De esta forma, se obtendrá un impacto muy positivo en las actividades económicas y la calidad de vida de la población.