
La seguridad es un aspecto fundamental que debe tenerse en cuenta a la hora de montar y operar cualquier instalación de energías renovables. Deben tomarse medidas para garantizar tanto la integridad de los materiales que se van a manipular como la seguridad de todo aquel personal implicado en la instalación. Además, estas medidas deben contemplarse en todos los momentos de la vida de la instalación: en el almacenamiento y transporte de los componentes, en el momento de montaje y después durante su funcionamiento y en las posibles tareas de mantenimiento.
Antes del montaje
El primer paso es evitar posibles daños tanto en el transporte como en el almacenamiento de los materiales. Es importante que, durante la fase previa al montaje de la instalación, los componentes se almacenen correctamente y se traten de forma adecuada: procurando que todos los elementos estén guardados en su embalaje original; los paneles fotovoltaicos deben apilarse evitando posibles caídas o rasguños; las baterías de electrolito líquido deben colocarse siempre en posición vertical; los elementos voluminosos como inversores y baterías deberán colocarse de manera que no haya riesgo de caídas, golpes o rasguños, etc.
Por otra parte, en la ingeniería del proyecto también hay que tener en consideración algunos aspectos de seguridad. A la hora de diseñar la instalación es importante dejar espacios limpios entre filas de módulos fotovoltaicos para permitir el paso de los operarios. Esto facilitará el montaje y mantenimiento. Respecto al resto de equipos (inversor, baterías si es el caso, etc.), deberán ubicarse en una sala convenientemente ventilada.
Durante el montaje de la instalación
Las normas de seguridad a la hora de llevar a cabo el montaje de una instalación fotovoltaica deben tenerse en cuenta, de acuerdo con la Prevención de Riesgos Laborales. El objetivo es garantizar la seguridad de las personas y no dañar los materiales.
Es obligatorio e imprescindible que durante la instalación el equipo encargado de llevarla a cabo cuente con los sistemas de seguridad necesarios (Equipos de Protección Individual o EPIs, línea de vida, arnés…). De lo contrario, se pueden poner en riesgo sus propias vidas y la integridad de los espacios físicos donde se está trabajando y de los equipos y componentes que se están manipulando.
La manipulación adecuada de los elementos frágiles y delicados, como son los paneles solares, y de los componentes pesados, como algunos inversores y las baterías, es clave para evitar su deterioro prematuro.
Los principales problemas que pueden surgir en la parte eléctrica son sobretensiones, sobrecargas y cortocircuitos. Estos fenómenos provocan daños y deterioros en la instalación, que pueden causar desde una disminución en el rendimiento hasta incendios. Para evitarlo, se deben incluir elementos de protección como fusibles magnetotérmicos y descargadores de tensión. Igualmente, debe hacerse la puesta a tierra de las instalaciones fotovoltaicas: de los equipos (tierra de protección) y de cualquier conductor activo (tierra del sistema).
Con la parte no eléctrica nos referimos a las estructuras, anclajes y otros elementos de sujeción de los componentes de la instalación. Éstos deben ser adecuados conforme a la ubicación y características físicas del proyecto. Deberán soportar la carga máxima posible del viento y, en caso de ser necesario, las cargas máximas por nieve.

Señalización con conos de zonas delicadas sobre cubierta
Respecto a la seguridad personal durante el montaje, es necesario tener en cuenta una serie de consideraciones:
- Si el trabajo se realiza en verano o con exposición directa al sol deben realizarse paradas periódicas para evitar la fatiga, mareos o deshidratación. Es importante que el operario beba agua con frecuencia y tenga a su disposición elementos para sombrear.
- Para los trabajos en altura, como las instalaciones de paneles sobre tejados y cubiertas, deberán contemplarse algunas normas básicas de seguridad:
- El operario debe sujetarse con un arnés a la línea de vida o puntos de anclaje para evitar caídas. Las líneas de vida pueden ser temporales (se montan, se usan y se desmontan de acuerdo con las necesidades del proyecto) o fijas.
- Uso de EPIs: casco para evitar golpes, calzado de seguridad para evitar golpes y resbalamientos, guantes para manipular herramientas de corte y taladrado. En caso necesario, también gafas para evitar deslumbramientos.
- Los desplazamientos sobre el tejado deben hacerse con cuidado, evitando pisar zonas frágiles como lucernarios o claraboyas y cuidando de no tropezar con los anclajes de los paneles. En caso de lluvia no es recomendable subir al tejado o cubierta, puesto que está resbaladizo y puede haber un mayor riesgo de caída.
- Parece de sentido común, pero es necesario recordarlo: no se debe caminar por encima de los paneles. Pueden producirse microrroturas de las células que, si bien no se ven a simple vista porque el vidrio templado del panel no se rompe, pueden causar problemas de puntos calientes.
- Se debe establecer un nivel de tensión de seguridad personal tanto en continua como en alterna, de 48 V de forma general. En circuitos con tensión superior a la de seguridad, no se debe manipular un conductor activo mientras el otro conductor activo esté accesible y no protegido.
En cualquier caso, el trabajo en equipo es fundamental: es más fácil evitar un accidente con compañeros comprometidos con la seguridad.
Durante la operación de la instalación
Una vez la instalación se pone en marcha para su funcionamiento habitual, los lugares de riesgo tendrán que estar convenientemente señalizados. El acceso a la sala de inversor y baterías estará restringido a aquellas personas autorizadas para su manipulación.

Manipulación de los paneles fotovoltaicos para subirlos al tejado

Línea de vida
La prevención debe ser siempre prioritaria frente a cualquier otro tipo de seguridad. Para evitar correr riesgos que puedan llevar a problemas, es importante contactar con instaladores fotovoltaicos profesionales que sepan tratar los materiales de la forma adecuada y que trabajen conforme a las normas de seguridad.
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